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Su tecnología de fabricación
Tallado convencional
El tallado de la lente hace referencia a la tecnología utilizada en la elaboración de los cristales. Este tipo de tallado, que sigue vigente en la actualidad y que se utiliza hace décadas. Consiste en el uso de lentes semiterminados, tallados con moldes de aluminio con las curvaturas específicas para cada tipo de corrección óptica.
Como el diseño, la curva base y la adición de los lentes progresivos se tallan en la superficie anterior de los lentes con estos moldes, el laboratorio debe tallar la prescripción del paciente en la superficie posterior utilizando un generador. Los lentes se afinan y pulen para completar la talla. Este proceso no permite ninguna personalización de los diseños progresivos. El tallado tradicional tiene muchas limitaciones.
Tallado digital
La tecnología free-form produce lentes altamente personalizados y precisos. Las superficies de los lentes son talladas mediante sistemas CNC (computadoras numéricamente controladas) lo que hace que el tallado esté perfectamente programado y controlado.
Ventajas de la tecnología Free-form
Se producen lentes con mayor calidad y comfort visual.
Se eliminan vicios de refracción y atenúan las aberraciones.
Se producen lentes más planos y delgados (se alcanzan los grosores centrales mínimos posibles, según la especificación de cada material).
Se producen lentes más planos y delgados (se alcanzan los grosores centrales mínimos posibles, según la especificación de cada material).
Se logran campos de visión más amplios (efecto de cerradura): se talla el diseño de progresión del lente y la fórmula del paciente en la superficie interna del lente.
Mayor exactitud en el diseño: hasta 10 veces más exacto, lo que se busca con un lente progresivo en general, es que el producto que llegue al paciente sea lo más cercano posible al diseño desarrollado por el fabricante. Permite tallar lentes con una precisión de 0.01 D contra las 0.12 D de la tecnología tradicional.
Personalización del diseño: al diseño de los progresivos freeform se incorporan características específicas de cada paciente y la montura que este escoja, lo que resulta en un diseño totalmente optimizado a sus necesidades específicas.
En las lentes progresivas es más notoria esta tecnología porque nos permite personalizar el lente disminuyendo las zonas de astigmatismo periférico (lo que aumenta el campo visual de lejos hasta un 20%) y mejorando la comodidad del pasillo intermedio. ¿Suena increíble cierto?.